Efectos de ser Anfitrión Mundialista: Estados Unidos

La Copa del Mundo es por mucho el torneo futbolístico más popular del planeta. La final entre Francia vs. Croacia en Rusia 2018 fue vista por una audiencia global de 1.12 billones de personas. A pesar de los beneficios que los anfitriones gozan por organizar dicho evento, hay algunos perjuicios que afectan al país al largo plazo. En esta breve investigación nos enfocaremos en el impacto económico y social que experimentaron varios anfitriones de la Copa del Mundo. El día de hoy analizaremos el Mundial de 1994. 

Estados Unidos 1994

Imagen Propia

En 1994, el Mundial sorpresivamente llegó a los Estados Unidos, un país donde el fútbol tenía (y tiene) poco protagonismo. La meta principal de ser anfitrión fue de crecer el deporte en el país ya que la influencia del fútbol estaba decreciendo luego de la clausura de la North American Soccer League (NASL) en 1984. 

Impacto Social

Estados Unidos tuvo una sobresaliente actuación en la competición. Los locales clasificaron por primera vez a los octavos de final desde 1930. En esa instancia, cayeron ante los eventuales campeones Brasil, partido donde 11 millones de estadounidenses miraron el partido un 4 de julio de 1994. 

Corto Plazo

En 1996, se inaugura oficialmente la Major League Soccer (MLS) con el enfrentamiento entre San Jose Clash vs. D.C. United. La nueva liga contaba con jugadores que destacaron en el mundial del 94, ya sea los estadounidenses Alexi Lalas (New England Revolution) y Cobi Jones (Los Angeles Galaxy) o los extranjeros Marco Etcheverry (D.C. United), Carlos Valderrama (Tampa Bay Mutiny) y Jorge Campos (Los Angeles Galaxy). El fútbol llegó a su auge en 2002, cuando Estados Unidos quedó a puertas de la semifinales, perdiendo por la mínima ante Alemania. Landon Donovan fue su máxima estrella, y durante ese período, representaba a los San Jose Earthquakes en calidad de cedido. Otros que destacaron y jugaban en la MLS fueron Brian McBride, Eddie Pope, DaMarcus Beasley y Cobi Jones. 

Fuente: Cobi Jones (Instagram)

Largo Plazo

Después de su logro en 2002, el fútbol ganó protagonismo en el país, mejoró su calidad de juego y desarrolló jugadores para el futuro. En 2014, fueron una de las sorpresas del torneo con sede en Brasil. Liderados por Tim Howard y Clint Dempsey, quedaron cerca de los cuartos de final. Actualmente, Estados Unidos luce como el mejor equipo de la CONCACAF, con la meta de crear un equipo ganador para 2026, Mundial donde serán nuevamente anfitriones junto a México y Canadá.

Impacto económico

Antes de iniciar, es importante mencionar que Rahmann et al. (1998) identificó tres factores que influyen en el impacto económico de la Copa del Mundo: 

  1. Nivel de inversión en estadios antes del evento
  2. Consumo extranjero en el evento
  3. Beneficios netos en el costo de mantenimiento de los estadios después del evento

Si nos enfocamos en los factores de Rahmann et al., vemos que el nivel de inversión en estadios fue mínima. Los organizadores eligieron estadios ya construidos que necesitaban un mínimo de inversión – Rose Bowl en Los Angeles, Giants Stadium en Nueva Jersey y RFK Stadium en Washington. Según Time (2014), Estados Unidos invirtió poco menos de 1 billón previo al evento, sacando provecho de su infraestructura desarrollada – medios de transporte, aeropuertos, centros de salud, seguridad – para ahorrarse en gastos externos a la competición. 

El consumo fue importante, con 3,587,538 millones de fanáticos presentes para el evento. La competición aportó también en la creación de nuevos empleos; un estimado de 3.3 millones fueron creados en 1994 con una tasa de desempleo de 5.6% – la más baja de ese período desde 1984. 

El costo de mantenimiento de los estadios después de la competición no fue mucho ya que mantuvieron su antiguo uso, albergar equipos universitarios y profesionales de fútbol americano (NFL).

Por último, debido a su mentalidad comercial y su decisión de utilizar estadios construidos y aptos para albergar los partidos en ciudades importantes, la U.S. Soccer Foundation se benefició de aproximadamente 50 millones de dólares en superávit. El dinero fue invertido en la renovación de estadios y centros de entrenamiento.

Conclusión 

En el caso de los Estados Unidos, la Copa Mundial fue todo un éxito. El fútbol empezó a influir en la sociedad y su selección a emerger en el ámbito mundial. Igualmente, su excelente infraestructura y decisiones minimizaron el impacto negativo económico en el corto y largo plazo. 

Va a ser muy difícil que el fútbol supere al béisbol, baloncesto y NFL en popularidad, no obstante, Estados Unidos se encuentra en el camino correcto para sorprender en el Mundial 2026 que se jugará en su país, algo que se debe en gran parte a lo vivido en 1994.


Bibliografía

Andrea, Wladimir y Szymanski, Stefan (2006) «Handbook on the Economics of Sport», Google Books

Judas, Gabriel (2020) «Un día como hoy se jugó el primer partido de MLS», https://www.tudn.com/futbol/mls/un-dia-como-hoy-se-jugo-el-primer-partido-de-mls

Petruno, Tom (1995) «1994-95: Review and Outlook: Thrills, Chills: The Real Economy Enters the Center Ring», https://www.latimes.com/archives/la-xpm-1995-01-01-fi-15454-story.html

Voigt, Kevin (2010) «Is Thera a World Cup economic bounce?», http://edition.cnn.com/2010/BUSINESS/06/11/business.bounce.world.cup/index.html

U.S. Soccer «1994 FIFA World Cup», https://www.ussoccer.com/history/us-soccer-as-host/1994-fifa-world-cup

U.S. Soccer «Timeline», https://www.ussoccer.com/history/timeline

Zimbalist, Andrew (2014) «Get Ready for a Massive World Cup Hangover, Brazil», https://time.com/2930699/world-cup-brazil-spending/


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Rendimiento: Juventus

Equipo Ideal: CONCACAF

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